Simple y racional, una casa atemporal, sencilla de volumen definido, casi cúbica, inconfundible y con una guarda como firma.
Vea otra casa racionalista en Buenos Aires.
El racionalismo arquitectónico es una corriente surgida en Europa luego de la Primera Guerra Mundial. El Art Nouveau señaló el paso hacia un plastificado de las líneas constructivas, pero derivó en ornamentalismo vacuo, entonces a principios del siglo XX surgió una corriente que rechazaba dicho ornamento y aprovechaba los descubrimientos de la llamada 2da. Revolución Industrial, el objetivo era encontrar un camino intermedio entre la renuncia a la imitación de lo antiguo y a un excesivo tecnicismo estandarizador.
Conjugando los propósitos racionalizadores y funcionalistas de la arquitectura de la Revolución Industrial que habían encontrado campo de experimentación entre 1890 y 1914, se formulan en la primera posguerra opciones arquitectónicas de objetivos y métodos cercanos con un repertorio formal y constantes relaciones hasta condicionar un estilo internacional con similitudes a las vanguardias pictóricas, especialmente con el Cubismo, basada en principios:
- Esqueleto estructural del edificio en lugar de la simetría axial
- Predilección por formas geométricas simples con criterios ortogonales
- Empleo del color y del detalle constructivo en lugar de la decoración sobrepuesta
- Concepción dinámica del espacio arquitectónico
- El uso limitado de materiales como acero, hormigón o vidrio (nuevos materiales)
Entre los años 1925 y 1940, la orientación racionalista se difunde en toda Europa por obras aisladas o por la penetración de métodos constructivos nuevos, originando la formación de diversas escuelas.
